El Partido regionalista de Cantabria cree que el PSOE no ha hecho lo suficiente para buscar una solución definitiva al problema del transporte urbano, el Castrobus, cuyos trabajadores siguen denunciando el “lamentable estado de la flota de vehículos”.
Creen los regionalistas, que el PSOE no ha sido capaz de llegar a un acuerdo con la empresa ni de gestionar correctamente el problema. “Ha sido demasiado pasivo optando por la vía más sencilla de la sanción a la empresa pero evidentemente no ha tenido resultado”, señala el Secretario del partido en Castro Jesús Gutiérrez en nota de prensa.
A juicio del edil, el equipo de gobierno se ampara bajo el pretexto de la dificultad de licitar nuevamente el servicio, si bien consideran desde el PRC que “tienen que afrontar este problema con valentía y asumir el reto de volver a licitarlo, aunque ello sea laborioso”, ya que lo usuarios “bien merecen el esfuerzo”.
Hoy precisamente se ha llevado a la Comisión de Desarrollo Territorial un punto relacionado con las deficiencias del Castrobus pero solo se ha tratado la desestimación del recurso interpuesto por la empresa a las sanciones económicas aprobadas por el Pleno municipal.
Gutiérrez recuerda que desde hace varios meses los trabajadores del transporte urbano vienen denunciando las condiciones lamentables en las que prestan el servicio. En todo este tiempo, nada ha cambiado ni para ellos ni para los usuarios, y cansados de que no se atiendan sus demandas para poder trabajar dignamente han remitido al PRC una serie de videos y de fotos denuncia sobre las deficiencias de los vehículos.
Una situación que supone un peligro para la seguridad, tanto de los conductores como de los usuarios, inciden los regionalistas.
“Hemos podido comprobar pitidos fuertes y constantes una vez el vehículo se pone en marcha, salpicaderos rotos a los que les faltan teclas y, peor aún, con varios testigos de fallos permanentemente encendidos; amortiguadores del asiento del conductor en malas condiciones; tapas protectoras del mecanismo del cierre de puertas ausentes dejando el cableado al descubierto; asientos muy sucios, y un descuido general del interior de los buses que generan una sensación de decadencia impropia de lo que se espera para este servicio”, concluye la nota.