El Pleno del Ayuntamiento de Castro Urdiales ha aprobado por unanimidad las tarifas del servicio de taxis de Castro Urdiales para el año que viene. Tarifas que se congelan, a propuesta de la asociación de taxistas, algo que ha sido valorado por los distintos grupos por el esfuerzo que supone esta decisión para el colectivo de taxistas por la subida de gastos a los que tienen que hacer frente.
Por otro lado, la corporación también ha sacado adelante con el desempate del voto de calidad de la alcaldesa, al haber empate en los votos a favor del equipo de gobierno (PSOE-Cs) y Podemos, la abstención del PP y en contra PRC y CastroVerde, la enajenación mediante subasta pública de una de las dos parcelas municipales en Cotolino (nº8) con el fin de conseguir financiación para el teatro cine que el equipo de gobierno proyecta junto al Pachi Torre.
Será la cuarta vez que se saque a subasta este terreno ya que en las anteriores quedó desierto por la falta de licitadores. Ahora al parecer, y pese a que saldrá por el mismo importe de 4,7 millones de euros, hay al menos una empresa interesada, según ha desvelado el edil de Urbanismo en Comisión informativa. Una tasación de principios de 2019.
La alcaldesa Susana Herrán ha defendido que “se trata de vender patrimonio para dotar de patrimonio a Castro con un nuevo cine teatro”, al igual que sus socios de gobierno, Ciudadanos que opinan que “el fin es bueno”, tal y como ha destacado el edil Jóse Mari Liendo.
La regidora ha defendido la labor de los técnicos municipales en la tasación del terreno.
No opinan lo mismo desde el PRC ya que creen que se “malvende patrimonio y se aumenta el endeudamiento para los castreños”, ha dicho el concejal regionalista Pedro Fuste. El edil ha insistido en que el Ayuntamiento debería actualizar la tasación y sospecha que “algo huele mal” en las alusiones referidas por el concejal de Urbanismo sobre el interés de alguna empresa “porque siempre hace cosas rarísimas”. “Parece que se está haciendo una subasta a la carta”, ha deslizado. Los regionalistas apuestan por “hacer cosas, hacer teatros pero que se puedan pagar, que no arruinen a los castreños”, ha señalado Fuste que ha puesto en duda la financiación del proyecto de teatro cine cuyo coste rondaría los 12 millones de euros.
El PP avanzaba que su voto sería de abstención porque no ha habido ningún cambio en el expediente y es el mismo que se aprobó en mayo de este año. La concejala Ariadne Krug considera que debería actualizarse la tasación de la parcela, y CastroVerde no está de acuerdo con la enajenación y el fin al que se quiere destinar el ingreso obtenido ya que aún vendiendo esta parcela faltarían 2/3 del coste que no se sabe de dónde se va sacar, así como el coste de su mantenimiento. “Es totalmente inasumible para el Ayuntamiento”, asegura el edil Eduardo Amor.
Desde Podemos, Alberto Martínez, ha vuelto a insistir en el espacio de auditorio que existe en el polideportivo de Sámano para su uso como cine teatro en tanto no se construya la nueva infraestructura proyectada.
Por otro lado, aun no siendo competencia municipal, el Pleno también ha aprobado por unanimidad la moción de Podemos-IU para solicitar al Ministerio de Transportes que inste a la empresa IRB concesionaria del servicio de autobús Castro-Bilbao a que recupere las frecuencias previas a la pandemia de las líneas de autobuses Castro-Bilbao (línea directa y por pueblos) y Castro-Hospital de Cruces-Barakaldo. Frecuencias que se han visto recortadas desde el inicio de la pandemia ocasionando numerosos e importantes trastornos para los usuarios de uno de los servicios más importantes en el transporte público entre Cantabria y Bizkaia.
Además, se pide al Ministerio que ponga en marcha a la mayor brevedad posible una alternativa ferroviaria entre Santander y Bilbao cuyos tiempos de recorrido sean competitivos con el vehículo privado y que Castro sea uno de los núcleos de población con parada.