El portavoz de Podemos en el Ayuntamiento de Castro, Alberto Martínez asegura que la fuga el emisario submarino de la estación depuradora de aguas residuales sigue vertiendo tanto o más que hace cuatro años, “por la cantidad de caudal con muchos sólidos en suspensión que salen por la rotura. “Según testimonios de buceadores el agua sabe y huele a agua residual en la zona y es frecuente ver peces enfermos. De hecho, la salida de agua por la rotura se puede ver perfectamente desde fuera del agua si no hay mucho oleaje”.
La situación ha sido puesta de nuevo en conocimiento de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria de la que depende MARE, así como de la Alcaldía y concejalía delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento, “con la intención de poner solución de una vez por todas a este despropósito”.
Podemos-IU recuerdan que en septiembre de 2021 presentaron una moción al Pleno del Ayuntamiento, solicitando que exigiese a la empresa pública MARE, que gestiona la estación depuradora de Ballena, explicaciones ante los vertidos incontrolados por una rotura de su emisario submarino, a solo 5 metros de la costa, con evidencias de agua muy turbia.”
Se trata de una de las “muchas incidencias” de esta instalación que costó casi 20 millones de euros, recuerdan desde la coalición, y con continuos casos de problemas desde su apertura, hasta el punto de que Ecologistas en Acción calificó por aquellas fechas como la peor de las diez depuradoras de aguas residuales que vierten al litoral o a zonas de dominio público marítimo terrestre de Cantabria, en cuanto a los valores recogidos en el muestro de sus vertidos.
La respuesta oficial de MARE fue reconocer que conocían de la fuga del emisario desde al menos 2019, así como asegurar la calidad del agua y del ecosistema, relatando su metodología. Es decir, restar importancia a la denuncia o al hecho en sí, pero sin embargo meses después anunció que licitarían su reparación.
Para Podemos-IU Castro Urdiales, es importante n olvidar que la gestión de esta empresa pública “ha venido marcada por la polémica con la proliferación de puestos directivos al más puro estilo chiringuito, o con casos como el vertedero de Meruelo. y la actuación de MARE en Castro Urdiales denota un olvido y pasotismo que roza lo criminal y nuestro Ayuntamiento está en la obligación de exigir medidas urgentes e inmediatas.