Los hechos se produjeron el pasado viernes, cuando una persona informó a la veterinaria municipal de la presencia de los cachorrillos muertos en un contenedor.
El Ayuntamiento de Castro Urdiales ha abierto una investigación y ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que colabore en ella.
«Pedimos a cualquier persona que tenga información sobre lo ocurrido que se ponga en contacto con la Policía local o con la veterinaria municipal», ha señalado la concejala Virginia Losada, que ha añadido que este tipo de actos no pueden quedar impunes y que debemos trabajar juntos para proteger a los animales y garantizar su bienestar.
Se recuerda a la ciudadanía que el abandono de animales es un delito y que existen vías legales para entregar a un animal a una protectora o asociación en caso de no poder hacerse cargo de él.
El artículo 340 bis de la Ley orgánica 3/2023 del Código Penal, en materia de maltrato animal, establece una pena de prisión de doce a veinticuatro meses, además de la pena de inhabilitación especial de dos a cuatro años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de animales, así como multa entre 50.001 y 200.000 euros.
