Octubre llega a Castro Urdiales con un recorte en las terrazas de la hostelería a la situación de mayo de 2020 cuando se permitió ampliarlas, sin coste alguno, para compensar la pérdida de aforo por la situación de crisis sanitaria. Un apoyo del Ayuntamiento al sector del que algunos establecimientos han abusado claramente en los últimos meses en los que hemos visto calles atestadas de mesas y sillas más allá de lo que en su día se permitió. Ello ha generado multitud de quejas de los vecinos.
La alcaldesa Susana Herrán se reunió ayer con una representación de los hosteleros de Castro (solo estuvieron presentes diez de los más de 240 asociados) para anunciarles la medida que empezará a aplicarse este fin de semana. Así nos lo ha contado uno de los hosteleros castreños Jóse Boyero que reconoce que ha habido un abuso y que a partir de ahora habrá que respetar la delimitación de cada establecimiento en su terraza, ya que de lo contrario llegará el apercibimiento, la sanción y multa, y en última instancia podrían llegar a “pagar justos por pecadores” y retornar a la situación original de la licencia antes de tiempo.
Por ello, y a la espera de que decaigan todas las restricciones sobre aforos, que supondrá retornar a las terrazas pre-pandemia, cada establecimiento tendrá que volver a disponer la terraza conforme a las medidas y autorización que la Policía local tomó en mayo de 2020. Además, no se podrán colocar mesas, sillas o barriles en el espacio de los establecimientos que estén cerrados.
Se está a la espera de los códigos QR, una especie de DNI de los locales en los que se informará de la licencia de cada uno, las mesas que puede poner o los aforos.
Quedó en estudiarse distintas propuestas que se plantearon para entre otros aspectos aumentar el horario de verano en las terrazas y el del ocio nocturno.
Jóse Boyero espera que , ante la mejoría de los datos de la pandemia, pronto decaigan las restricciones sobre aforos y se pueda volver a la normalidad. Reconoce asimismo que la ampliación de las terrazas ha supuesto un balón de oxígeno para el sector.