La alcaldesa de Castro Urdiales, Susana Herrán, considera que hay establecimientos comerciales y de hostelería que “se han hecho con las calles”, sobrepasándose y excediendo la flexibilidad y confianza del Ayuntamiento en cuanto a la ocupación del espacio público con terrazas, toldos y demás mobiliario. Establecimientos que, en general, se ubican en la zona del casco viejo, con calles estrechas y donde debe respetarse el plan especial del conjunto histórico.
Seis meses después de que se dictara un primer bando para informar a estos locales de que se volvía a la normalidad tras la pandemia y de que la ocupación del espacio público no debía superar la superficie autorizada, ahora se les da un “ultimátum” para que desde mañana cumplan o de lo contrario serán sancionados y retirados los elementos irregulares. Tres sanciones leves y después el cierre, recuerda la regidora, para quienes alardean de que una sanción les compensa ocupar terreno público sin autorización.
“Nos hemos visto en la tesitura de ser estrictos”, decía Herrán, que insiste en que “hay unas normas que hay que cumplir”.
La alcaldesa reconoce que hay muchas quejas vecinales por este problema.
En general, los locales han ido cumpliendo y volviendo a sus licencias y autorizaciones, si bien, algunos otros “se han relajado” y de ahí se ha visto la necesidad de una nueva advertencia.
Desde ayer, agentes de la Policía local están entregando a los establecimientos el Bando de Alcaldía dándoles un plazo hasta mañana viernes para que retiren cualquier otro tipo de elemento colocada sin autorización.
Susana Herrán ha remarcado que hosteleros y comerciantes “siempre han contando con nuestro apoyo y lo van a seguir teniendo pero no puede ser que haya gente que haga lo que le dé la gana y encima perjudique a terceros. Son decisiones duras pero no puede ser que ante el derecho a trabajar se esté coartando el derecho de la ciudadanía a disfrutar de los espacios públicos. Hay que convivir y en la convivencia está el respeto”, ha zanjado.