Acaba de finalizar el periodo de exposición pública del nuevo Plan de Restauración Ambiental de la concesionaria Canteras de Santullán SA, al que CastroVerde ha presentado varias alegaciones al considerarlo “regresivo medioambientalmente“.
La Consejería de Industria publicó el nuevo documento en cumplimiento de la Sentencia que dictó el TSJC ante la demanda de Ecologistas en Acción, que denunció el incumplimiento del plan de restauración exigido por la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de noviembre de 1993, que condicionaba la concesión de 1995, y su falta de adaptación al Real Decreto 975/2009.
Recuerda Castro verde que el convenio urbanístico de 2000, que permitió ampliar la Cantera de Santullán, pero que se “vendió” a la opinión pública con la cesión de los jardines del Castillo de Ocharan, se justificaba en “velar por un medio ambiente adecuado para las personas y conservarlo”, así como en “resolver inconvenientes medioambientales surgidos por la explotación de las Canteras de Santullán” y evitar “impactos ambientales indeseables”.
No obstante, “lejos de haberse cumplido mínimamente lo anterior, cualquier persona ha podido observar que la cantera ha crecido sucesivamente en todos los ámbitos, sin que haya quedado a salvo ningún área con encinas y demás vegetación original, y sin que tampoco se haya hecho ningún esfuerzo para reponerlo“.
La DIA obligaba a la conservación de los ejemplares de encinar cantábrico además de impulsar su expansión a los espacios colindantes. Sin embargo, “todas las encinas de la ladera este han sido ya destruidas bajo las labores de extracción y la actividad pretende que las que persisten entre el lapiaz de la ladera sur desaparezcan en los próximos años“.
En la autorización del Plan de Restauración de 2008 se establecían unos criterios y cronología de actuaciones “que han sido sistemáticamente incumplidos, sin que se perciba un solo euro gastado en labores de restauración de la ladera norte. Esto, además del factor ambiental, ha tenido como consecuencia que no se haya generado el empleo previsto para la restauración, y en cambio los planes de la empresa pasan por volver a explotar la ladera norte, como se recoge en el nuevo Plan de Restauración presentado“, señala CastroVerde.
Por todo lo indicado, esta formación reclama un Plan de Restauración que “garantice una verdadera recuperación de la peña tras décadas de explotación sin un atisbo de reinversión de los millones de euros de beneficios empresariales obtenidos a costa de nuestro Medio Ambiente y de la salud de los habitantes de los alrededores que deben soportar los ruidos y sobre todo la polución del aire, aspectos por los que debería velar la Consejería de Industria como administración competente“.