El instituto de enseñanza secundaria Ataúlfo Argenta de Castro Urdiales culmina hoy, con la I carrera solidaria que se está celebrando desde las once en el parque Amestoy, una iniciativa de apoyo y solidaridad a las familias castreñas que peor lo están pasando con la recogida de más de 3.000 kilos de alimentos y productos de higiene básicos que se entregarán a Cruz Roja y Una más Uno.
La campaña se ha completado con una serie de charlas por voluntarios de ambas asociaciones para concienciar al alumnado.
El parque Amestoy acoge desde esta mañana la I carrera solidaria en la que están participando buena parte de los alumnos del centro y que ha contado con el apoyo de distintas autoridades.
La Consejera de Educación, Marina Lombó, se ha desplazado hoy a Castro Urdiales para con su presencia respaldar esta iniciativa. Lombó ha señalado que se trata de una acción “importantísima porque soy consciente que todo cambio social comienza en la escuela. Apoyar a un centro con una iniciativa como ésta comprometida con la solidaridad y la igualdad es merecedora de los que tenemos un cargo político apoyemos. Una acción que cumple dos objetivos muy importantes. En primer lugar, una ayuda directa a un determinado grupo poblacional con unas necesidades y por otro inculcar a los alumnos unos valores de solidaridad que es muy necesario”, ha dicho.
Para la consejera, “que la escuela esté tan comprometida me parece que es en unos momentos de una dificultad como la que acabamos de vivir estos dos años dice mucho de unos docentes comprometidos con la educación y el futuro de nuestros alumnos.
Lombó ha mostrado su satisfacción por poder participar y ha dicho que está segura que “abrir un centro educativo a la sociedad y que el resto de población vea que eres sensible, que conoces sus problemas y quieres participar es algo muy importante, para toda la comunidad en la que se hacen este tipo de acciones. Es un ejemplo para que otros hagamos acciones de este tipo”, ha concluido.
La alcaldesa Susana Herrán ha mostrado también su apoyo a esta iniciativa tan “positiva” en la que el Ayuntamiento ha colaborado con la organización. La regidora se ha mostrado “muy orgullosa” por la implicación de la juventud, un colectivo, ha recordado, que ha sufrido los efectos de la crisis sanitaria y que han perdido parte de su adolescencia. Así, para Herrán “esta fórmula de implicación social es muy satisfactoria y un orgullo para el municipio”.
La alcaldesa ha recordado las distintas actividades realizadas por el centro y los talleres de educación emocional y mindfullness organizados por el Ayuntamiento para ayudar a los jóvenes a gestionar sus sentimientos frente a los efectos de la crisis sanitaria.
El director del centro Miguel Ángel Torío ha dicho que el objetivo de esta iniciativa “era despertar conciencias” y en este sentido, las más de 3 toneladas de productos recogidas dice mucho de la implicación del alumnado y las familias. Una iniciativa que surgió de la coordinadora de igualdad del centro escolar, Bea Barca, a la que inmediatamente se sumó el claustro, el alumnado, familias y el Ampa.
“Ver a los chavales participando ha sido una satisfacción, es algo que nos deja un poso”, ha señalado y ha añadido que esta actuación tendrá una continuidad en el tiempo “porque las necesidades van a continuar y por el sentimiento de pertenencia a una comunidad y de apoyo mutuo entre todos, la solidaridad”.
Apoyo y orgullo que también han mostrado los directores de Juventud y Turismo del Gobierno regional presentes en la carrera junto con otras autoridades locales.