
El Ayuntamiento de Castro se lo había solicitado la pasada semana con el fin de erradicar el foco de suciedad y mala imagen que suponía la acumulación de material de obra y residuos varios que se acumulaban en el exterior de la plaza cuyas obras de rehabilitación están paralizadas desde hace un año. La retirada de las vallas indica que las obras no tienen visos de reanudarse a corto plazo. La tramitación de un modificado para actuar en la cubierta está alargando el proyecto de reforma.
Ayer comenzó la retirada y limpieza de la zona donde ha quedado un pequeño espacio vallado con unos restos en una de las entradas.
