La Consejería de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo del Gobierno de Cantabria ha adjudicado a la empresa Demoliciones submarinas S.L un contrato menor por importe de 6.171 euros, impuestos incluidos, para que realice una inspección subacuática del emisario submarino y del emisario de tormentas de la Estación depuradora de aguas residuales de Castro Urdiales.
El plazo de ejecución de estos trabajos es de 31 días.
La inspección se llevará a cabo tras la denuncia hecha por Podemos el pasado 24 de septiembre y el Pleno del 28 de ese mes en el que se pidieron explicaciones a la empresa MARE sobre una posible rotura del emisario submarino de la EDAR y una investigación sobre si esto podría estar ocasionando vertidos de aguas depuradas cerca de la costa y no a un kilómetro como sería lo normal.
En dicho Pleno, el PRC desveló que el Gobierno de Cantabria había previsto incluir una partida económica en el presupuesto de MARE de 2022 destinada a la revisión y reparación del emisario submarino de la estación depuradora de aguas fecales de Castro Urdiaeles (EDAR) . Y ello, por los “resultados contradictorios” que han arrojado distintas inspecciones realizadas en la instalación en cuanto a su integridad.
Esta empresa dice también que cumple con todas las normativas y protocolos para el tratamiento de los residuos fecales. Sobre que la planta no funciona al 100% de su capacidad, MARE explica que eso se debe a que no se alcanza el caudal del agua límite para el que se diseñó en tiempo seco, que se depuran correctamente, y que en cualquier caso este tipo de infraestructuras “son complejas y pueden dar problemas puntuales”.