El Ayuntamiento de Castro Urdiales ha contratado los servicios de Francisco Sebastián Delgado, por importe de 3.206 euros, IVA incluido, para la realización del proyecto, dirección de obra y coordinación de seguridad y salud para obras de derribo del edificio del antiguo Langostero de Islares, cuyo estado es ruinoso. Así se recoge en el Portal de transparencia de la web municipal.
El inmueble es propiedad de tres entidades bancarias que no se están encargando de mantenerlo en condiciones de seguridad. De hecho, el Ayuntamiento ha tenido que proceder al vallado de la zona y ha corrido a cuenta de los trabajos de recogida del material desprendido del edificio por el viento y su posterior traslado a la planta de reciclaje, con la contratación a Transportes Mariur, por importe de 3.460 euros, IVA incluido que cobrará posteriormente a los propietarios.
Hace un mes, la alcaldesa de Castro Urdiales Susana Herrán nos decía que estaba siendo complicado notificar a los propietarios del inmueble la obligación de mantenerlo en unas condiciones que no supongan ningún riesgo. Actualmente, están completamente tapiadas la entrada y ventanales.
Es por ello que una vez se ha asegurado el edificio, se comunicará a la Demarcación de Costas la decisión de que se declare en ruinas y se proceda al derribo. Si finalmente, en la tramitación del expediente, los dueños no se hacen cargo, será el Ayuntamiento el que asuma la demolición y posteriormente traslade el coste a los tres bancos propietarios.
Imagen de archivo antes de que se tapiara la entrada y ventanales.